miércoles, 31 de diciembre de 2008

Reiki ante la muerte

El reiki ante la muerte lo experimento como un lenguaje que los "todavía sanos y vivientes" podemos utilizar adecuadamente con los moribundos. El lenguaje sutil que mejor entienden éstos, ya que a medida que su estado se va haciendo más terminal, se van desapegando del cuerpo y van haciendo más consciente, precisamente ese "estado del ser" energético que en poco tiempo se habrá desencarnado para gozar de su ser pleno de energía y consciencia y amor incodicional. Así fue el proceso de mi madre y con mi madre. Pocos días antes de ser ingresada (y una semana y media antes de fallecer) volvió a tener la experiencia de salirse del cuerpo (tal y como mi maestra Amrita nos recordaba cuando la inició en el primer nivel reiki) y experimentó con mayor intensidad la dicha de ese estado de desapego al plano físico, se sentía ligada apenas por un hilito al plano material. Lógicamente no significa que si tienes experiencias de este tipo seas necesariamente un paciente terminal, pero los moribundos lo experimentan más a menudo que los sanos y más conscientes.
En los días previos a su muerte, ella estaba entubada y sedada y el reiki era el medio de transmitirnos, de comunicarnos, de sanarnos, de acompañarnos mútuamente, ella en su proceso hasta que su cuerpo físico cesara finalmente y nosotros para desligarnos de ella, de su presencia física, de su presencia como madre, como ser individual. Nosotros al estar todavía atrapados en nuestro vehículo de carne, nos resulta muy dificil, tomar consciencia de el estado energético, pero el reiki es una puerta a esa dimensión que actúa en todos los niveles de existencia, y que emanan, de lo único que es y existe, que es Dios.
La muerte es extremadamente bella si la contemplamos a través de la experiencia trascendente del Ser que mora en cada uno de nosotros, es un viaje hacia la inmortalidad y el reiki un telegrama que nos llega en cada instante y nos reafirma que esto es así, intemporal (sin espacio/tiempo), liberador y eterno.
Sobre estos temas, el cómo acompañar a los moribundos, etc... aconsejo la obra de KÜBLER-ROSS, Elisabeth. La muerte un amanecer y sus libros sobre las "experiencias cercanas a la muerte".

2 comentarios:

  1. La foto pertenece al libro manos que curan de Barbara Ann Brennan. No recuerdo que estuviera vinculada con la muerte. Si no recuerdo mal es una terapia para curar el alma que Barbara usa con ayuda de los guías, uno de ellos Heoeyan o algo así. Vale la pena el libro. Está disponible en internet.

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